Pinkillo
En segundo lugar después de la quena, el pinkillo es el aerófono más popular del Norte de Chile y del área de influencia andina, de origen quechua y aymara.
Su estructura es muy similar a la quena, pero en la abertura superior lleva una boquilla semejante al clarinete. consta de siete agujeros y se ejecuta en forma vertical. En la parte posterior lleva otra abertura para armonización; es uno de los instrumentos folclóricos más completos y cumple funciones de música folclórica del norte.
Existen diversas variedades de pinkillos, desde los rectos usados principalmente en el norte grande hasta los pinkillos curvos usados en las áreas de las quebradas de San Pedro de Atacama y que, por ser de estructura singular, destacan en forma especial debido a su diferente funcionalidad.
Los grupos de bailes de Sólor y Séquitor que concurren a las festividades de San Pedro de Atacama, bailes del Toro, llevan como instrumentista a una sola persona, la cual es llama Niño Menor el cual toca simultáneamente el Tambor y el Pinkillo. Este cuelga el Tambor en su hombro derecho con una cuerda, y la sujeta entre los
dedos pulgares e índice de sus cordajes; con los tres dedos restantes interpreta las melodías del pinkillo ya que con su mano izquierda debe manejar la baqueta. Como el pinkillo tiene siete perforaciones, los músicos tapan los agujeros superiores del instrumento con una tela fuerte enrollada en varias vueltas.
En las festividades religiosas de la Virgen de las Peñas de Livilcar y en La Tirana, las bandas instrumentales usan Quenas y Pinkillos de tamaños mayores que los comunes, que en muchos casos sobrepasan de los 50 cms. de largo, ya que deben ejecutar las melodías en espacios muy abiertos y con la concurrencia de infinidad de conjuntos danzantes, los cuales rivalizan con la sonoridad y la destreza musical.